Diferentes consultas vinculantes confirman la deducibilidad de estos gastos
En el caso de que una CRO española ejecute en suelo español un ensayo clínico encargado por su matriz extranjera, la sociedad española tendría positivamente derecho a la deducción fiscal por I+D+i, por el hecho de estar llevando a cabo materialmente una actividad de I+D, sin perjuicio de que dicha actividad le haya sido encargada por una entidad extranjera (ya sea su matriz extranjera o, en última instancia, el promotor).
Se trata de una interpretación del art. 35 de la Ley del IS, explícitamente reconocida en diversas Consultas Vinculantes a la Dirección General de Tributos. A modo de ejemplo, las Consultas Vinculantes V1658-10 y V1892-13 confirman esta interpretación:
En ambos casos, las consultantes son sociedades españolas que actúan como CROs, gestionando en suelo español ensayos clínicos por encargo de empresas extranjeras (en ambos casos, su propia matriz extranjera).
V1658-10: “en el caso en que las actividades calificadas como de investigación y desarrollo fueran efectuadas por un sujeto pasivo del Impuesto sobre Sociedades por encargo de una entidad que no es residente en territorio español, ni actúa a través de establecimiento permanente situado en el mismo, la deducción sería practicada por la entidad, sujeto pasivo del Impuesto, que desarrollara materialmente la actividad de investigación y desarrollo”.
En ambos casos, la respuesta de la DGT confirma la deducibilidad de los gastos como I+D:
V1892-13: “en el supuesto concreto planteado, dado que las actividades calificadas como de investigación y desarrollo son efectuadas por un sujeto pasivo del Impuesto sobre Sociedades (consultante), por encargo de unas entidades que ni son residentes en territorio español ni actúan a través de establecimientos permanentes situados en el mismo, la deducción será practicada por la entidad consultante, sujeto pasivo del Impuesto, que desarrolla materialmente la actividad de investigación y desarrollo”.